Organizaciones de la sociedad civil, proveedores mineros y la empresa MARA llevan adelante un plan de obras comunitarias en la localidad catamarqueña de Andalgalá que incluyen mejoramiento de edificios escolares, instalaciones de clubes y de canales de riego.

Según comentaron desde las entidades, se trata de una gestión planificada entre proveedores mineros locales, instituciones del medio y Proyecto MARA, que a la vez genera empleo y un movimiento económico más que interesante para la Perla del Oeste.

En este plan, como comentó Miguel Cardozo, titular de la Cámara de Proveedores local, trabajan nueve pequeñas y medianas empresas andalgalenses que generan empleo para más de 160 vecinos y vecinas de Andalgalá, especialmente de los distritos Choya, Potrero, Chaquiago y Villa Vil. Estas empresas, a la vez, realizan sus compras a proveedores locales del segundo y tercer anillo.

Como funciona el programa de desarrollo

Cada una de las 9 empresas cuenta con un equipo de entre 16 y 18 trabajadores locales, casi la mitad de ellas mujeres, siendo, para muchos, su primera experiencia laboral en blanco.

6 de estas empresas locales llevan delante tareas de albañilería y electricidad en Instituciones de la localidad catamarqueña, como escuelas, cooperadoras, clubes etc. de acuerdo con un pedido de cada una de estas instituciones a la empresa MARA.

Este plan es un esfuerzo conjunto, ya que las instituciones que presentan el pedido deben aportar el material para las obras. Así las cosas, equipos de trabajo de estas empresas realizaron, hasta ahora, tareas de mantenimiento en el Hospital José Chaín Herrera, mantenimiento, pintura e instalaciones eléctricas en escuelas como Choya, Potrero, Huachaschi y Malli, y obras en clubes como Ferro.

Historias Mineras

Más canales, más obras de infraestructura de riego

También, con este plan, tiene continuidad las tareas de revestimiento y mejoramiento de obras de infraestructura de riego, puntualmente en las localidades de Choya y Potrero, inciado durante 2022.

El plan es continuar realizando estas mejoras, que permiten a los productores de estas localidades optimizar el riego de sus cultivos.

Muchos de los trabajadores que integran cada una de las empresas locales que llevan adelante las tareas son también pequeños productores agrícolas, por lo que, como dicen en testimonios audiovisuales, el beneficio es doble.

“Nos dan trabajo, cobramos un sueldo para mejorar nuestras fincas”, afirma en un video Oscar, productor y trabajador choyano.

Fuente: Ámbito