Por Luciana Glezer

Las exportaciones de minerales acumularon un total de 2.209 millones dólares durante los primeros siete meses del año, superando un 31% lo exportado el 2021. La minería logró así ubicarse como el quinto sector exportador de la Argentina y promete ser un importante motor de ingreso de divisas.

Las exportaciones de productos mineros significaron el 4,2% de las exportaciones totales argentinas en julio de 2022. Esto es equivalente a una variación interanual del 31% interanual para el acumulado del año, situándose un 7% por arriba del nivel promedio del lapso 2010 2021.

Marcaron así 17 meses consecutivos de crecimiento, alcanzando el nivel más alto para el acumulado de los primeros siete meses del año desde el año 2013, donde las mismas habían contabilizado 2.269 millones.

Del total exportado durante julio 2022, 196 millones corresponden a minerales metalíferos, pero el mayor dinamismo se observa en el litio que creció en apenas un año un 205%. De hecho, las exportaciones de litio se duplicaron en un año y aumentaron considerablemente su participación en la torta general.

Las exportaciones mineras significaron el 4,2% de las exportaciones totales argentinas en julio de 2022. Esto es equivalente a una variación interanual del 31% para el acumulado del año.

La Argentina tiene un enorme potencial en recursos mineros. No solo por el litio del norte, las explotaciones cupíferas en San Juan o por el oro y la plata en el sur. También suman la cal y la arena de Córdoba. Y lo que abunda en las cordillera aún por descubrir. Basta comparar el enorme desarrollo minero de Chile, anclado en la misma cordillera que tiene la Argentina.

Por eso, las estimaciones de la Secretaría de Minería indican que en apenas tres años la Argentina podría triplicar sus exportaciones mineras y rondar los 10 mil millones de dólares anuales.

Durante el actual gobierno, la Secretaría de Minería presentó el Plan de Desarrollo Minero (PEDMA), una manera de darle un marco a una de las actividades a las que apuesta el Gobierno para empezar a salir de la trampa de la restricción externa, esto es la cíclica falta de dólares que atenaza el desarrollo argentino.

Hoy la minería está regulada por los gobiernos provinciales, porque son los que tienen el dominio del recurso, que llegaron a un acuerdo federal con la Nación en 1993 el cual fue acompañado por la ley de inversiones mineras. Sucede que desde ese momento a esta parte aparecieron nuevas tecnologías, nuevos actores, nuevas inquietudes, aspectos sociales y ambientales que debían ser considerados.

El PEDMA, que se realizó con financiamiento del BID fue discutido con todos los actores posibles, empresarios, trabajadores, ONGs, hasta integrantes de las distintas iglesias, que se plasmó en un plan a 30 años donde se busca asegurar estabilidad fiscal y jurídica, en una actividad que demanda inversiones de cientos y miles de millones de dólares.

Fuente: Lapoliticaonline.com