Por Daniel Díaz

Tal vez pocos sepan que una de las actividades económicas más cotidianas en el Valle de Lerma, como la extracción de áridos, forma parte del sector minero. Su impacto es muy importante en lo económico, en lo laboral y fundamentalmente para el medio ambiente.

El geólogo salteño Jorge Torres, de la Secretaría de Recursos Hídricos, en diálogo con El Tribuno, contó: "Los áridos forman parte importante del sector minero. Todo cuanto de ello se trate se encuentra en el Código de Minería, especialmente en lo que se refiere a su extracción, concesiones y unidades, entre otras".

Consultado respecto a si se trata de una actividad que tiene un impacto negativo en el ambiente, explicó que, como toda explotación, el resultado depende de las formas en que se realiza. "La extracción debe realizarse del tercio medio, es decir de la zona centro de los ríos, por donde escurre el agua. Ese sector, precisamente, es en el que más se acumulan los sedimentos", detalló.

Explicó que los descartes se depositan al costado de los causes, es decir, en las líneas de rivera. "La extracción es necesaria, porque mantiene el equilibrio de la sedimentación. De otra manera, con la acumulación el agua tomaría otros rumbos, desbordaría ocasionando inundaciones", señaló el geólogo.

Aunque resulte obvio, se hace necesario aclarar que los ríos son públicos, en su mayoría. Solo son considerados privados cuando nacen y mueren en una propiedad particular, pero éste no es un caso que se dé en la región.

• De casi todos los cursos de agua de Salta se extraen áridos, entre ellos La Caldera, Wierna, Vaqueros, parte del Mojotoro, la zona oeste del Arenales y en el río Rosario, donde existe una actividad intensiva de esta minería.

"No está permitida una extracción superior a un metro y medio de profundidad en el tercio medio, permitiendo el libre escurrimiento de las aguas al retirar los obstáculos. Es por eso que se trata de una actividad minera necesaria. De otro modo, retirar el sedimento sería muy costoso para el Estado", señaló el especialista de Recursos Hídricos.

A cargo de los controles se encuentra la Policía Minera, dependiente de la Secretaría de Minería y Energía de la Provincia. Romina Sassarini, titular del área, indicó en reiteradas oportunidades que, en cuanto a la extracción de áridos, es política del Gobierno colaborar con los municipios con el cumplimiento de la normativa vigente y en el fortalecimiento del control sobre la extracción ilegal.

De los ríos se extrae grava y gravilla, en sus diferentes granulomerías; arena fina, mediana y gruesa; piedra bola, etc. Cada uno de estos materiales tiene un fin específico. Son utilizados principalmente por la industria de la construcción en el enripiado de calles, en la obra pública y en la fabricación de muchos productos de uso cotidiano. Es una de las materias primas más consumidas y utilizadas por diferentes sectores. Sirven –entre otra cosas- para la preparación de hormigón y fabricación de elementos como ladrillos.

"La extracción de áridos se renueva todos los años y depende del régimen de lluvias, por eso es tan importante para evitar desbordes", concluyó Jorge Torres.

Las cifras

• En promedio, de acuerdos a datos de la industria, el 69% de los áridos se utilizan en pavimentos, vigas, pilares, cimientos, revestimiento de ladrillos, bloques, tuberías, veredas y cordón cuneta.
• Un 22% se usa en pavimentación. El porcentaje restante tiene otros usos, como en el sector ferroviario y urbanismo, entre otros.

Tercera categoría

La extracción de áridos en los ríos forma parte de lo que se denomina minería de tercera categoría. También es considerado de la misma forma la producción de lajas, ónix, perlita y puzolana, entre otros.

Componen la tercera categoría las producciones minerales de naturaleza pétrea o terrosa, y en general todas las que sirven para materiales de construcción y ornamento, cuyo conjunto forma las canteras.

La erosión de las rocas, de la mano del clima de las distintas regiones, dan como resultado un surtido variado de materiales pétreos. La piedra bola, la base estabilizada (empleada debajo del asfalto), el ripio e incluso la bendita arena empleada en mampostería, son denominaciones que reciben todos estos sedimentos que son transportados por los ríos y que no sólo por razones comerciales es necesario practicar su extracción.

• La minería de tercera categoría tiene requerimientos administrativos y geológico-ambientales como rige para cualquier otra categoría de minerales.

Fuente: El Tribuno