El sector minero chileno enfrenta un desafío importante porque necesita convencer a las nuevas generaciones para que trabajen en los proyectos que tiene el vecino país en agenda hacia el 2032.

Para ese se calcula que se necesitarán 34 mil nuevos trabajadores, un tercio más de lo que se proyectaba hace tres años. De acuerdo a lo que indica Diario Financiero, a la cantidad de proyectos que tiene en carpeta Chile, se suma una generación de mineros que se está jubilando y necesitan ser reemplazar.

Estos datos surgen del estudio realizado por la Alianza Consejo de Competencias Mineras-Eleva, que además de entregar una estimación de la demanda de capital humano, busca detectar la oferta formativa y las brechas existentes para la próxima década.

"Fuerza Laboral de la Gran Minería Chilena 2023-2032" es una investigación participaron 16 empresas mineras y 11 empresas proveedoras, con una muestra de 78.149 trabajadores de la gran minería.

La falta de trabajadores se manifiesta en primera instancia porque un alza de la demanda para la realización de nuevos proyectos y expansiones.

Al aumento de demanda por proyectos se suma la cantidad de trabajadores en edad de retirarse a 2032, que equivale al 80% de la demanda estimada. El 20% restante equivale a la demanda de trabajadores que se requerirán para operar los nuevos proyectos.

Según el informe, el total de la fuerza laboral de la gran minería llegó a 173.000 personas (2022) y tiene un fuerte sentido local: el 67% de los trabajadores declara vivir y trabajar en la misma región.

El estudio reveló que a 2032 hay un déficit de 8.876 mantenedores mecánicos, 5.052 operadores de equipos móviles y 4.308 de operadores de equipos fijos. Faltarán también 1.692 supervisores de mantenimiento y 1.030 operarios eléctricos.

Las dificultades que ha observado la minería para acceder a estos tipos de operarios radica en tres aspectos claves: falta de experiencia laboral, escasas competencias digitales y limitadas habilidades conductuales.

El abanico de opciones que tienen los jóvenes dentro de su país y en el mundo, hace que sea más complicado reclutar personal adecuado para los procesos y la especialización que se requiere

Fuente: Memo