La UOCRA, en alerta, recibió planteos de trabajadores del proyecto minero 3 Quebradas
Representantes de la Unión de Obreros de la Construcción (UOCRA) desembarcaron en el proyecto minero Tres Quebradas, operado por la empresa china Zijin y su subsidiaria local Liex y ubicado en el departamento de Tinogasta, para realizar asambleas con los trabajadores y marcar presencia en medio de la construcción del campamento de la firma.
Allí se encontraron con muchas quejas relacionadas con maltratos por parte de la patronal y se declararon en alerta. Aunque no tomaron medidas de fuerza, no es una posibilidad que se descarte. “Estamos generando un diálogo, pero no nos va a temblar el pulso si tenemos que parar el proyecto”, anticiparon.
Mediante publicaciones en redes sociales, hubo reclamos respecto de las condiciones laborales en las que trabajan los empleados que participan de la construcción del campamento de Liex-Zijin en Fiambalá, algunos de los cuales, mencionaron, no reciben la indumentaria y calzado adecuados para el trabajo, no tienen régimen de roster e incluso denunciaron que tienen trabajadores no registrados en el proyecto.
En diálogo con El Ancasti, el representante de UOCRA para la región, Luis Caballero, comentó que hace aproximadamente 30 días están generando un acercamiento con la empresa y los trabajadores. En este sentido, explicó que ayer se realizaron algunas asambleas informativas en el lugar, aunque descartó que se hayan tomado medidas de fuerza, tal como señalaban algunas versiones.
“Estuvimos hablando con los compañeros, informando las gestiones que estamos realizando y recibimos algunos de sus planteos. Hubo muchos relacionados con maltratos, así que hemos planteado que no vamos a tolerar que no se respeten los derechos laborales”, mencionó Caballero.
Uno de los planteos que circularon en redes y que el gremialista reconoció fue respecto de diferencias culturales con el personal de origen chino. “Somos respetuosos de sus costumbres pero hemos planteado que tienen que respetar también nuestras costumbres y derechos. Eventualmente no nos va a temblar el pulso si es necesario para parar todo el proyecto”, advirtió el sindicalista.
Antecedentes
En junio y julio de este año, Liex estuvo bajo la lupa por conflictos que involucraban despidos y una mala relación con comerciantes locales. Allí debió intervenir la Dirección de Inspección Laboral cuando hubo manifestaciones por la desvinculación de un grupo de trabajadores. Luego también intervino el Gobierno en un reclamo de los comerciantes, que cuestionaron el poco nivel de compre y contratación local que tenía la empresa.
Sin embargo, el mayor conflicto en el que se vio involucrada la empresa fue en agosto pasado, cuando se conoció que la Dirección General de Aduana, dependiente de AFIP, le abrió una investigación por sobrefacturar importaciones de maquinaria destinadas a la explotación del litio en Fiambalá.
Según se conoció, la Aduana detectó importaciones de bienes de capital que fueron declaradas a un valor “ampliamente superior al valor de mercado en comparación con mercadería idéntica” y que estas operaciones fueron trianguladas vía Hong Kong por más de cinco millones de dólares.
Esto provocó las críticas de la oposición, que cuestionó la falta de controles del Gobierno y que, en la boca del candidato a vicegobernador Hugo Ávila (JPC), denunciaron además que la firma ingresaba maquinaria por Chile y no era patentada en Catamarca.
La situación fue desmentida por el Ministerio de Minería, que aclaró que la investigación de AFIP se había iniciado por una advertencia de la Provincia a la Secretaría de Minería de la Nación.
Fuente: El Ancasti