La decisión de Taca Taca sobre las retenciones
Las retenciones móviles optativas que dispuso el Gobierno nacional para la exportación de cobre puso en una disyuntiva a quienes llevan adelante el proyecto Taca Taca, sobre el que existe la mayor expectativa en Salta por su potencial de transformar la matriz productiva local. Desde la empresa subsidiaria del yacimiento cuprífero salteño adelantaron a El Tribuno la decisión que prácticamente está definida con respecto a ese impuesto, que coincide con lo que hablaron los directivos de la minera First Quantum Mineral (a cargo de Taca Taca) con el gobernador Gustavo Sáenz y funcionarios del Ministerio de Economía de Nación el lunes pasado durante la feria PDAC en la ciudad canadiense de Toronto.
Lejos de la grandilocuencia oficialista con la que fue presentado el nuevo régimen para los derechos de exportación, la medida no tuvo la aceptación unánime que se esperaba en el sector. El flamante instrumento tributario (vigente desde el lunes con el Decreto 308/2022) permitirá a las compañías de cobre elegir entre la continuidad de una alícuota fija de 4,5%, o un esquema de tasas variables de entre 0% y 8% según la evolución del precio del mineral. Quienes se inscriban podrán acceder por treinta años al régimen, el cual fija una alícuota de 0% en el caso de que el precio internacional de la tonelada de cobre sea igual o inferior al valor base de US$7.700.
De los tres proyectos de cobre más avanzados del país, en dos, que corresponden a los sanjuaninos Josemaría y Pachón, se manifestaron conformes con las retenciones móviles y en el tercero, Taca Taca, optarían por continuar con la carga fija del 4,5% en sus exportaciones.
Fueron más lejos en la Cámara de Empresarios Mineros (CAEM) de Argentina y la Cámara Minera de San Juan, desde donde se opusieron al nuevo régimen y hasta lo consideraron ilegal con respecto a la ley nacional de Inversiones Mineras.
Adelanto
"La empresa en este momento está estudiando el nuevo esquema, pero creo que nos vamos a inclinar por mantener el sistema del 4,5% fijo de retenciones y no hacer ese sistema seudoprogresivo, porque no lo consideramos progresivo ya que no considera circunstancias como la inflación internacional", dijo a este diario Carlos Ramos, vicepresidente de Corriente Argentina, que depende de First Quantum.
La secretaria de Minería de la Provincia, Flavia Royón, quien participó de la reunión entre el gobernador y los ejecutivos de la minera canadiense, coincidió que ese será el camino que seguirán en Taca Taca.
"Prefieren mantener una carga fija antes que el sistema móvil", señaló la funcionaria en una consulta para esta nota.
Fue en ese encuentro en Canadá donde Carlos Ramos planteó, a través de una videollamada, que el esquema de retenciones móviles no contempla la inflación en dólares que impacta a las operaciones mineras.
"Esto de aumentar la retención porque aumentó el precio internacional del cobre tiene un fundamento, que es que la empresa está ganando más, pero la inflación es algo que va a impactar sobre el sistema, porque le aumenta los costos a la minera y al no considerar la inflación se empieza a reducir el margen de la operación", explicó el empresario.
Efectivamente, los funcionarios de Economía de Nación que estuvieron en la reunión admitieron que en el esquema de retención no se contempló la inflación internacional.
Se puede tomar como positivo, más allá de la controversia, que el proyecto Taca Taca, que contempla una inversión de alrededor de 4 mil millones de dólares para construirlo, sigue vigente.
En esa línea, Ramos destacó que en el Gobierno nacional se comprometieron a analizar otro punto que frena la edificación de la primera mina de cobre de la Puna salteña, que es el IVA de construcción.
"Construir una mina de cobre lleva unos tres años y medio o cuatro años. En ese tiempo nosotros estamos pagando IVA. Traemos dólares que se transforman en pesos y pagamos a nuestros proveedores. El problema es que ese IVA se recupera, porque no estamos facturando, entre 17 y 18 meses después. El IVA que va a pagar Taca Taca va a ser alrededor de 600 millones de dólares, eso lo transformamos a pesos y se nos licua con la inflación en pesos de un año y medio", expresó Ramos.
"Eso lo plantee en Toronto y debo decir que la gente de Economía dijo: "Tiene razón, algo tenemos que hacer con eso'", destacó el directivo.
Fuente: El Tribuno / Pablo Ferrer