Un reciente informe de IDTechEx estima que <8% de la demanda mundial de cobalto y <6% de la demanda de litio serán suministrados por baterías de iones de litio recicladas en 2030.

Las baterías de iones de litio dominan el mercado de vehículos eléctricos (EV), son parte de la vida cotidiana en la electrónica de consumo y prevalecerán en el almacenamiento de energía estacionario.

Sin embargo, la sostenibilidad de las baterías de iones de litio depende de todo su ciclo de vida, incluida la gestión al final de su vida útil. Además, existe una creciente preocupación por el suministro de materias primas como el cobalto.

El reciclaje puede recuperar el valor incrustado de los metales de las baterías para generar ingresos adicionales y una cadena de suministro circular, que está protegida contra la fluctuación de los precios de los productos básicos de los materiales de las baterías.

Las partes interesadas en toda la cadena de suministro de baterías de iones de litio están reconociendo el potencial del reciclaje, y se espera que el mercado de reciclaje de baterías de iones de litio crezca en las próximas dos décadas. En 2042, se reciclarán 12 millones de toneladas de baterías de iones de litio obteniendo $51 mil millones de dólares en metales valiosos.

Según el analista de mercado, en 2030 se podría recuperar un total combinado de más de 180.000 toneladas de litio, cobalto, níquel y manganeso a través del reciclaje de Li-ion, un valor que se prevé que crezca aproximadamente 10 veces hasta 2042.

Para la empresa británica, el reciclaje no será una bala de plata ni solucionará todos los retos a los que se enfrenta la industria del Li-ion, pero puede ayudar al cambio hacia una economía circular y desempeñará un papel importante para minimizar la escasez de materiales y los impactos negativos de la producción de baterías de Li-ion.

En opinión de los expertos de IDTechEx, algo que hay que tener en cuenta es que es posible aumentar la proporción de cobalto reciclado dado que el metal se utiliza sobre todo en la electrónica de consumo, donde se espera que el crecimiento de la demanda sea mucho más lento que en los vehículos eléctricos, y la reducción de la intensidad del cobalto en las baterías de los vehículos eléctricos.

"En teoría, aproximadamente el 15% de la demanda de cobalto podría satisfacerse con material reciclado para 2030", dice el informe.

"En realidad, como se indica en las previsiones de IDTechEx, es poco probable que esto ocurra debido a la dificultad de recoger y desviar las baterías con alto contenido de cobalto de la electrónica de consumo. En última instancia, todas las partes interesadas de la cadena de suministro deben asumir la responsabilidad de los impactos éticos de sus productos", agrega. 

En opinión de los expertos de IDTechEx, el valor inherente a las baterías de la electrónica de consumo sugiere que es necesario considerar una recogida y distribución más exhaustiva a las instalaciones de reciclaje pertinentes.

Esto es especialmente importante si se tiene en cuenta la posibilidad cada vez mayor de que se produzcan cuellos de botella en el suministro de materiales.

"IDTechEx estima que la escasez de cobalto podría producirse a partir de mediados de la década de 2020, y se prevé que también se produzcan cuellos de botella en el caso del litio, y posiblemente también en el de otros materiales", afirma el dossier. 

"En consecuencia, el reciclaje de Li-ion adquiere una importancia añadida. Aunque no podrá satisfacer la demanda de materiales prevista en un futuro próximo, podría desempeñar un papel en la minimización de la escasez de materiales y de los cuellos de botella, lo que interrumpiría la transición a los vehículos eléctricos, el despliegue del almacenamiento de energía estacionario y deprimiría el mercado de las baterías de Li-ion", completa el informe. 

Fuente: Mining.com / Mining Press