Caso de éxito en minería. Cómo aprovechar las oportunidades que ofrece la industria



Mariela Gregorio es la gerente general de Full Box, una empresa mendocina de packaging. En 2019, un integrante de la Asociación de Geólogos de Neuquén la contactó para preguntarle si podía enviarle 50 mil sobres geológicos en 10 días. Aunque la cantidad era significativa y ni siquiera sabía cómo se armaban, respondió que sí. Con el tiempo, se convirtió en proveedora de la minería y el petróleo.
Lo primero que hizo, cuenta, fue investigar qué eran los sobres geológicos: unos contenedores para las muestras de tierra, armados con un papel resistente, para enviar ese material al laboratorio para su análisis. Si bien son sencillos de armar, no contaba con personal suficiente para poder cumplir con el plazo, al que debía restar dos días de envío, ya que no hay maquinaria que los haga y se deben armar a mano.
Entonces, decidió buscar entre los currículums que suelen recibir en la empresa a personas que pudieran sumarse a la tarea desde sus casas. Optó por cinco mujeres con niños pequeños, que no pueden tomar otro tipo de trabajo, porque el salario no les alcanza para pagar a una niñera. Y, con la colaboración de la familia -en ciertos casos participaron los hijos más grandes, por ser una labor manual-, lograron tener los 50 mil sobres listos en cinco días.
“Yo vi una necesidad y le planteé una solución inmediata (al geólogo), porque quería estar en el negocio. Quería proveerle a la asociación y tener acceso a la industria minera y petrolera”, detalla. Pero también señala que tuvo que reconfigurar su visión de la empresa y abrir una red de trabajo para otras mujeres.
La estrategia funcionó, porque hoy es la única proveedora del laboratorio geológico más importante de la provincia y de varias petroleras cuando inician la exploración para un pozo. Subraya que, como su producción es chica, puede satisfacer la demanda de pocas cantidades a quienes están empezando y que, cuando el emprendimiento crece, les recomienda compañías más grandes.
Gregorio es, además, abogada, con un máster en derecho empresarial y empezó su carrera con el asesoramiento a pymes. Después, se especializó en derecho minero y trabajó con dueños de canteras; lo que se conoce como minería de tercera categoría. El pedido de los sobres geológicos le abrió la puerta a la posibilidad de enlazar sus dos pasiones: la minería y la fabricación de envases de cartón. Es que Full Box tiene 53 años de trayectoria e inició como Cartonera Oeste, cuando la fundó su padre.
Cómo insertarse
Gregorio contó su experiencia en el primer encuentro del Ciclo Mujeres y Negocios en Minería, organizado por la Fundación Mujeres que Inspiran(entidad que promueve el desarrollo de proveedoras para la industria) y el Gobierno de Mendoza. En ese marco, planteó que, cuando se habla de minería, se suele pensar que es un mundo inaccesible, porque se lo vincula con grandes obras, maquinaria pesada y una ingeniería compleja. “Y muchas camionetas”, añade con un toque de humor.
“Pero ahí nos equivocamos, porque cuando desembarca una minera en una comunidad, necesita una red de proveedores completa y buscan en el entorno a emprendedores y empleados. Y ahí tenemos un mundo: indumentaria, alimentación, logística, transporte. Tenemos la parte de salud, seguridad, higiene, capacitaciones, recursos humanos y hasta una simple caja. Por lo tanto, no es inaccesible”, resaltó.
“Esto quiere decir que cualquier empresa y cualquier emprendimiento, chiquito o grande, puede ingresar y tener esa oportunidad. Pero siempre hay que ver la necesidad que tiene la minera. Analizar cómo podemos adaptar nuestro producto o ese servicio a lo que realmente necesita”, añadió.
Gregorio también comentó que es muy común que quienes quieren convertirse en proveedores busquen hablar directamente con la minera. “Pero muchas veces lo más importante es proveer a otro proveedor ”, advierte y subraya: “No estar en el centro del escenario no significa que estás fuera del juego. Y esto es así en cualquier industria; minera, petrolera, de alimentos, vitivinícola”.
Informarse y vincularse
Para Gregorio, desde su experiencia, es muy importante informarse para conocer el mercado. Y, en minería, en especial, conocer cómo trabaja una empresa minera y qué proyectos están encaminados. En esta línea, mencionó que hay varios en Malargüe Distrito Minero Occidental, que están comenzando la exploración, y PSJ Cobre Mendocino -su hermano, Fabián, es el presidente-, podría convertirse en el primero de explotación de cobre en Mendoza.
Pero resaltó que no sólo hay que enfocarse en Mendoza, sino que se debe pensar en la posibilidad de extenderse a otras provincias, como San Juan. Para eso, consideró fundamental participar en los diversos encuentros sectoriales y rondas de negocios que están organizando las cámaras y los gobiernos, como también en capacitaciones que ofrecen entidades y empresas.
También mencionó que es importante conocerse, lo que implica saber bien cuál es el producto o servicio, y los límites de producción, ya que hay que poder cumplir en el largo plazo y que la propuesta sea profesional.
Sumó que es necesario formalizar el emprendimiento, para lo que hay que asesorase con profesionales: escribanos, abogados, contadores especializados en estructurar empresas; que también deben especializarse en minería. Y destacó la importancia de invertir en capacitación, automatización de procesos y, en general, en tecnología.
“La empresa tiene que sí o sí contar con una misión, con una visión y un plan de acción bien definido para que puedas presentarte como proveedor de esta industria. La minería es un espacio exigente. Se tienen que cumplir normativas. Quien las cumple se va a sostener en el tiempo y quien se profesionaliza va a ir creciendo. Esto lo aprendí de mi papá”, aporta.
Para la empresaria, para ingresar en la industria “hay que mirar más allá del punto de entrada más obvio” y esto implica no solamente buscar la contratación directa por parte de las mineras, sino relacionarse con otras personas y proveedores. “Este es un mundo súper amplio y hay que aprender a escabullirse en el medio”, lanza.
Resaltó que el que crece y se sostiene no es por una cuestión de suerte, sino por conocerse y aprender a gestionar. “Y eso se aprende, se entrena constantemente y se tiene que compartir con los demás”, cerró.
Fuente: Diario Los Andes