"¿El litio consume mucha agua?". Fue el disparador de un comentado posteo de la Red de Académicos por el Desarrollo (RAD) de una Minería Sustentable, que puede servir para llevar luz en un tema que suele generar polémica en la discusión pública sobre la minería. Como siempre, la RAD, integrada por científicos y profesionales de todo el país, brindó fundamentos en base a datos reales y comprobables.

Para refutar ese "mantra" con el que se busca atacar a la industria del litio, la organización académica tomó las afirmaciones que sostienen el supuesto consumo desmedido de agua en la producción de carbonato de litio. Se habla de "2 millones de litros de agua" para lograr obtener una tonelada de ese producto.

"Empecemos por lo más elemental. ¿Qué estamos midiendo? ¿Litros con toneladas? Si todos sabemos que 1 litro a 4°C pesa esencialmente 1 kg", arrancó con la explicación la publicación de la RAD en su cuenta de Twitter.

"Entonces vamos de nuevo. Para hacer un kilo de litio (carbonato de) necesitaríamos 2.000 litros de agua (spoiler: no son 2.000). Ahora sí cabe preguntarse, ¿Es mucho o es poco? Todo es relativo", continúa.

"El litio es casi 100% reciclable a diferencia de otros productos desechables o consumibles que usamos a diario. ¿Conocés la huella hídrica de todo lo que consumís? Sería bueno ser conscientes de ello", sigue el posteo y cita algunos ejemplos.

Uno es un estudio realizado para la Unesco. "Si fueran 2.000 litros (de agua), el kg de litio estaría entre 1kg de cereal y uno de oleaginosas", señalaron en la popular red social.

"Vamos con una criolla, desde la UNLP (Universidad Nacional de la Plata), el doctor e investigador de Conicet Luis Guarracino señala que un kilo de soja requiere 2.300 litros de agua y uno de carne, 16.000. E introduce cuestiones claves: procesos; recuperación; agua contenida; disponibilidad donde se produce", consignaron para remarcar lo relativo de las afirmaciones temerarias, y desinformadas, en cuanto al consumo de agua en las industrias.

"La huella hídrica que no suele mirarse es la del 'Fast Fashion'", indican en la publicación y recuerdan un informe que da a conocer que para producir una remera se necesitan 2.300 litros de agua o 10.000 litros o más para un pantalón de jean.

"Resulta que en el desierto de Atacama hay un basural de ropa. Sí, un lugar donde hay -por lo menos- 100.000 toneladas de prendas. Muchas tienen etiqueta y nunca fueron utilizadas", marcaron la paradoja del argumento seudoambientalista.

"También podemos usar la magia de los números a la inversa. Con 1 kg de litio se pueden producir entre 300 y 500 celulares. O decir que se ahorrarán miles de litros de combustible y emisiones (con su huella hídrica) o evitar la contaminación del agua de gases de efecto invernadero".

"Una relatividad más que podemos agregar es la del uso económico. Exportamos un kilo de carne o soja a 6 U$S/kg pero carbonato de litio a 30 U$S ¿Dónde usamos mejor el agua? ¿Es más necesario uno que otro? ¿Cuántos alimentos terminan en la basura? Más preguntas que respuestas", advirtió la RAD.

Y se atajaron: "Por supuesto, nos responderán, uno se cría o cultiva en un lugar de abundancia y el litio en una zona de escasez. Cierto, pero de nuevo la relatividad entra en juego. ¿Es tal la escasez? Los números tienen que analizarse a nivel de cada cuenca, con sus recargas y salidas. Para ello se realiza un estudio de impacto ambiental, se aprueba, cada autoridad fiscaliza y monitorea y los estudios se actualizan cada 2 años. Veamos los datos del caso de Jujuy, lejos de los 2.000 litros por kg (o 2 millones por toneladas) la relación es de 622 litros de salmuera y 55,8 litros de agua industrial", consigan y lo compararon con una producción de litio en Chile que muestra consumos similares.

"Una vez más #EmosidoEngañado y seguiremos siendo bombardeados con exageraciones porque de eso se trata: magnificar el impacto ambiental y minimizar el enorme impacto para el desarrollo del NOA", consignan.

"Más claro, echale agua", finaliza la publicación.

Fuente: El Tribuno