Mientras en el Congreso sigue trabada la ley de Humedales y las organizaciones ambientalistas manifiestan por su pronto tratamiento en distintos puntos del país, la minería salió a fijar su posición frente a este tema que genera fuerte preocupación entre los gobiernos provinciales y entre los empresarios de la actividad, quienes vislumbran pérdidas millonarias en las potenciales inversiones.

El proyecto de ley de Humedales es una propuesta para regular y conservar los humedales del país, que cubren aproximadamente el 20% del territorio nacional. Desde el año 2013 se vienen presentando  distintos proyecto de ley por diferentes fuerzas políticas pero todos perdieron estado parlamentario.

La semana pasada, hubo una nueva postergación en el tratamiento del tema, debido a un pedido de varios gobernadores que pidieron ser escuchados en el marco del debate. Inclusive, en una charla organizada por Clarin, semanas atrás, el gobernador de Catamarca, Rul Jalil, dijo sobre el tema que "no se puede legislar sobre el desconocimiento".

Por eso, la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), decidió salir a manifestar su “más enérgico rechazo a la falta de federalismo de concertación en el debate de los proyectos legislativos de protección de humedales y la necesidad de participación de los sectores productivos afectados”, señaló en un comunicado.

“Rechazamos toda propuesta de regulación que desde el desconocimiento condene la producción y la calidad de vida digna en las zonas alejadas de los grandes centros productivos de nuestro país donde la minería se desarrolla, y que vaya en contra del espíritu federal de nuestra constitución nacional", continuó la nota.

Según la visión de los empresarios mineros,“de aprobarse, los proyectos dejarían al país sin industria minera. "No solo significa frenar las nuevas inversiones, sino también poner en riesgo el trabajo de los yacimientos que ya están en funcionamiento", señaló la entidad, quien opina que la autonomía de las provincias, (en cuanto a la administración de sus recursos naturales y la regulación en materia ambiental) se ve vulnerada en varios de los proyectos que se están tratando en el Congreso.

En cambio, la ambientalista Greenpeace asegura que "los humedales poseen un enorme valor biológico, social, cultural y económico. Son claves para el funcionamiento de la naturaleza en su conjunto. Un 21,5% de nuestro país está cubierto por una gran diversidad de humedales, alcanzando a todas las provincias argentinas y se estima que el 40% de la biodiversidad mundial vive o se reproduce en ellos", dijo la organización en un comunicado.

Según CAEM, en medio está la ecuación económica: "la minería es el quinto complejo exportador nacional y aporta al Estado más de $ 107.000.000.000 al año", explica. Y asegura que la Argentina puede consolidarse como uno de los principales productores mineros a nivel mundial. "Tomando los proyectos mineros más avanzados, hay potencial para llegar a exportaciones anuales por US$ 12.000 millones (más del triple de las actuales) y lograr inversiones por US$ 20.000 millones". 

Finalmente, la cámara destacó que "todos los proyectos mineros en marcha han pasado por instancias de aprobación de sus evaluaciones de impacto ambiental (ley 24585). La legislación actual no permite emprendimientos que dañen al ambiente, independientemente donde estén instalados".

La polémica por el debate de la ley de Humedales tiene detrás una importante pulseada económica. En especial, en estos tiempos, cuando lo que más se está impulsando es la explotación del litio, como insumo de la electromovilidad. Sucede que parte del área de extracción del mineral está comprendida en la zona de humedales. Mientras todo esto sucede, el litio está logrando un precio internacional récord al tocar los US$ 70 mil la tonelada. 

Fuente: Clarín