Los "picapiedra": no todo es oro y litio en la industria minera
Por Silvia Naishtat
Hoy están muy golpeados por el freno a la obra pública y es el lado B de una minería pujante en el oro, el cobre y el litio.
Corría 1969 en una Córdoba marcada por la rebelión obrera y estudiantil que pasó a la historia como el Cordobazo. Aquel año, lo que empezó como un pequeño negocio de la familia Apfelbaum en La Calera, a 10 kilómetros de la ciudad capital, se iba a convertir después en una explotación minera de las rocas metamorfoseadas que pueblan esas sierras.
La piedra, un objeto inerte, suma desde entonces más aplicaciones y permite construir rutas, puentes, rellenar vías de ferrocarril, sanitarios y ladrillos especiales, por nombrar algunos. Más aún hasta el Obelisco y el Congreso están construidos con las rocas de La Calera que los mineros agrupan bajo el nombre de no metalíferos o áridos.
Pero desde la parálisis de la obra pública que arrancó con el gobierno de Milei, la cantera Diquecito de los Apfelbaum pasó de despachar 100.000 toneladas mensuales el último diciembre a 20.000 en abril.
Algo parecido le pasa a su competidora Cantesur de capitales santafesinos también en La Calera. Basta dar unos pasos en esa zona para observar como se apilan montañas de piedras en diversos tamaños que ningún camión pasa a buscar. No se trata de un caso aislado ya que alcanza a La Pampa, una parte de Santa Fe y Santiago del Estero.
Y es lo que explica que la Cámara de Empresarios Mineros haya elegido a Córdoba para celebrar el día de la Minería. Decidieron que los llamados picapiedra, como se denomina a los dueños de las canteras, describieran su situación.
Hay otros temas difíciles que abordaron como el costo que tendrá ahora con el impuesto país cualquier giro al exterior. Celebran, en cambio, el RIGI, el régimen que ideó Javier Milei para alentar inversiones que superen los US$ 200 millones y que cuenta con amplias ventajas impositivas.
No es para menos. El alemán Michael Meding, de la canadiense McEwwn Mining, está desarrollando un colosal proyecto de cobre que implica obtener de bancos y otros inversores US$ 2.500 millones. “Hay viento a favor si Argentina respeta las reglas y coloca incentivos. Hay riqueza en cobre y se pueden generar exportaciones por US$ 10 mil millones”, dice.
Ese mineral esencial para la conectividad tiene demanda creciente en una región en la que Chile y Perú generan el 40% del cobre del mundo. En la Argentina hay ocho proyectos como el de Meding y cinco están en San Juan.
Roberto Cacciola, titular de la Cámara de Empresarios Mineros (CAEM) se refirió a la oportunidad que genera el oro a US$ 2.300 la onza. “Todo depende de la estabilidad macro y que se cumpla la ley”, afirma.
La actividad, que emplea a 100.000 trabajadores con los segundos salarios más altos después de los petroleros, paga un 3% en concepto de regalías a las provincias y otro 4,5% en retenciones. En el caso del litio hay tres empresas que lo explotan y existen seis proyectos en construcción y otros 20 en las gateras.
En la celebración del día de la minería, con una cena que congregó el último martes a 350 empresarios, embajadores y varios gobernadores en Córdoba, el flamante secretario del área, Luis Lucero, informó sobre una encuesta que revela el cambio de época.
“La sociedad aprueba los proyectos a los que relaciona con la oportunidad de trabajo y progreso”, señaló Lucero. Y ofreció más señales. Considera que si la minería ya está incluida en la Constitución de 1813 no puede prohibirse y en caso de que se interrumpa sin justificación, quienes lleven adelante ese tipo de protestas deberán hacerse cargo de los costos que implica. Se llevó los aplausos de la noche.
En esa comida buena parte de las mesas estaban ocupadas por los “picapiedras” de Córdoba que ocupan a 3.500 empleados en unas 230 firmas, el 93% pymes familiares en una actividad en la que también se obtiene cuarzo y otros minerales para la industria de la fundición, además de la imprescindible dolomita que corrige los suelos ácidos por la presencia del calcio y que por su contenido en magnesio ayuda a la fotosíntesis de las plantas. El árido cordobés aporta el 20% de estos minerales.
En esas canteras con tecnología de última generación para evitar el polvo y los ruidos, una trituradora a mandíbula va tomando las rocas y las va convirtiendo en pedazos cada vez más pequeños. Una parte va a las rutas. Por cada kilómetro de autopista se necesitan 1.000 camiones de roca, asegura Hernán Soneyro, gerente de Cantesur. Cada tonelada de piedra se paga hoy $ 20.000.
En el mundo se mueven 44 billones de estas piedras al año. China con un consumo per cápita de 16 toneladas por habitante lidera el mercado. En EE.UU se consumen 12 y en la Argentina ínfimas 1,4 toneladas. Córdoba se destaca en el rubro y sus canteras ya son una referencia global. Este año recibirá en un congreso bianual a los mayores picapedreros del mundo
Fuente: Clarín