Todos ríen y celebran. Detrás de ellas, un enorme cartel recuerda los logros alcanzados por la mujer a lo largo de los últimos años. La mayoría son sanjuaninas pero también hay de otras provincias. Sin embargo hay dos que llaman mucho la atención, una de ellas portando un hiyab, un velo cruzando la cabeza y el pecho. Ambas son de Pakistán y llegaron a la Argentina para formarse en minería. 

Saira Hassan y Fatima Sherjan, tienen 25 y 24 años de edad. Hace tres meses llegaron a San Juan proveniente de Baluchistán, una provincia de Pakistán. Su arribo se dio tras un proceso de selección en el contexto de un programa de intercambio y capacitación impulsado por la empresa Veladero que tiene una duración total de 15 meses.  

Dar el paso de salir de su país, cruzar el mar, para desembarcar en este otro continente fue un gran desafío para las chicas. No sólo porque dejaban atrás sus familias sino porque se adaptaban a una nueva cultura, tradiciones y formas de vida a 4.800 metros de altura. Pero todo eso no hubiera sido posible sin el apoyo de sus propias familias.

"Mi familia estaba como, ¡oh vayan, vayan y tengan algo de experiencia allí!. Luego volvé y trabajá. Eso fue genial, muy apoyador", señaló Saira con mucha euforia a Diario La Provincia SJ. La joven es ingeniera civil y su sueños es absorben toda la experiencia para ser una buena profesional en su pueblo. 

Pese al corto tiempo que llevan en estas tierras, el cariño de la gente las ha conquistado. "La gente aquí en San Juan es muy humilde, muy generosa, muy cooperativa. Desde el gerente hasta el trabajador más simple. Todos son iguales y tienen la misma actitud. Eso es lo que más me gusta", expresó Fatima a lo que Saira agregó: "Para nosotros es bastante cómodo estar acá porque la gente de Argentina es súper buena. Son acogedores, cálidos. Cada vez que nos conocieron nos invitaron a la casa, a tomar un mate, comer un asado. Son súper buenos con nosotros".

Fatima es ingeniera en energía renovable y destacó que cerca de Pakistán está la mina cuyas características son similares a las de Veladero. Al igual que su compañera, su sueño es poder crecer en la minería, en su país. "Por eso estamos entrenando aquí porque es similar y cuando regresemos a Pakistán, trabajaremos en nuestro proyecto", destacó.

La fuerza de las mujeres

El lugar de la mujer en el mundo varía de acuerdo a cada país, su cultura y religión. En algunos países más desarrollados, la mujer consiguió lugares estratégicos y jerárquicos en igualdad de condiciones que el hombre. En otros, aún queda mucho por recorrer y alcanzar esos lugares. Para Fátima y Saira, Pakistán ha logrado mejorar el lugar de la mujer.

"En este día somos más empoderados, sentimos que somos iguales a los hombres, y lo más importante es que los hombres nos respetan más en este día, que nos respetan todos los días. Así que nos sentimos más respetadas", expresó Saira a lo que subrayó: "estamos entrenando en operaciones de minas y el entrenador nos dijo que ahora la mayoría de las mujeres están en operaciones de minas. Eso fue genial". 

Por su parte, Fátima destacó que siente que "las mujeres tienen mucho que hacer. Podemos hacer cosas maravillosas. Es como si las mujeres tuviéramos algunas espaldas invisibles. Tenemos la libertad, podemos hacer todo. Solo necesitamos reconocer que las mujeres podemos hacerlo. No somos menos que los hombres".

Fuente: Diario La Provincia SJ