Buscan que las obras de la ruta 51 comiencen entre agosto y septiembre
Por Martín Rodríguez
El trayecto de la ruta nacional 51, desde San Antonio de los Cobres hasta Cauchari, es clave para la actividad minera. Por la gran cantidad de vehículos pesados que transitan por allí, la ruta sufre un profundo deterioro, por más que las máquinas viales realicen periódicamente tareas de mantenimiento.
El sector minero sabe que debe trabajar de manera veloz para mejorar la infraestructura vial en Los Andes. Es por eso, que empresas mineras que tienen proyectos radicados en la Puna y constructoras locales planean pavimentar ese tramo de la 51. La misma se hará con una importante inyección de capitales privados, y sería el primer proyecto vial con el esquema "a la chilena" que el gobierno de Javier Milei propone implementar.
En diálogo con El Tribuno, Diego Pestaña, titular de la Cámara de Proveedores de Empresas Mineras de Salta (Capemisa) y gerente general de AGV, reveló que están trabajando para que las obras de construcción comiencen este año.
"Tengo la esperanza de poder tener todo avanzado para iniciar obras a partir de agosto o septiembre. Es una obra privada en la que los estados nacional y provincia no aportarían fondos en esta parte de la ruta. La pagarían los que la usan comercialmente y no la gente de las comunidades, para ellos sería un beneficio que se les da ese acuerdo que hay con la minería para que ellos no paguen. Esta obra le mejoría los costos a la minería aún pagando peaje. Yo estoy tratando de comunicarme y tener el visto bueno de Nación", expresó el empresario.
La propuesta que están manejando desde AGV implicaría la creación de una empresa concesionaria respaldada por un fondo fiduciario, financiado por aportes de las mineras. Esta iniciativa no solo mejoraría la eficiencia y seguridad del transporte, sino que también beneficiaría a las comunidades y a la industria turística al convertir una ruta actualmente problemática en una arteria asfaltada.
"Con ese pavimento cambiaría drásticamente la problemática del transporte a la Puna porque la ruta actual está asentada con calamina y piedra. Eso produce rotura de camiones, levantamiento de polvo, accidentes y una cantidad de inconvenientes que se solucionarían. También los tiempos del transporte mejorarían. Básicamente se financiaría con aportes de las mineras que van a recuperar esa inversión con peaje", destacó Pestaña.
Los peajes, no sólo tienen que financiar la construcción de la obra, sino también el mantenimiento de las rutas. "La ruta 51 desde San Antonio Los Cobres hasta Campo Quijano, ya está empezando a tener problemas de bacheo, fisuras, y eso hay que mantenerlo. Entonces, si no se inicia un trabajo de mantenimiento y reparación rápido, se entra a deteriorar", destacó.
Costos de pavimentación
Con un costo estimado de unos 30 millones de dólares, es un monto significativamente menor en relación con los 150 millones de dólares originalmente proyectados por Vialidad nacional por obras que nunca se hicieron. Este proyecto es esencial para el desarrollo sostenible de la región y cuenta con el respaldo tanto de actores mineros como de proveedores, quienes reconocen los beneficios económicos y logísticos de una infraestructura vial mejorada.
"Estamos hace 40 años trabajando en hacer una nueva ruta que sería fantástica. Con pendientes diferentes, curvas, una ruta para un país como Noruega. Pero la realidad de Argentina, es que no estamos con capacidad para financiar esa obra. Y por eso ya han pasado tantos años y la obra nunca se hace. Entonces lo que proponemos no es la obra ideal, es la obra posible, que es pavimentar la ruta actual. Con ese pavimento cambiaría drásticamente la problemática del transporte a la Puna", destacó Diego Pestaña.
Fuente: El Tribuno