Por Luciana Paz

En la celebración del cuarto aniversario de Women in Mining Argentina, la ex secretaria de Energía de la Nación participó del panel sobre el rol de la minería en la transición junto con la presidente de Red MIA y Comisión de género y diversidad de UIA, Irini Wentinck.

El mundo habla cambio climático y de metas cero emisiones pero en la práctica se sigue utilizando el carbón "en el tema de transición energética hay que ser más pragmático que ideológico, y a eso me refiero, en el punto de la transición energética debe irse dándose adelante en la medida y en las capacidades de cada uno de los países, de cada una de las regiones. Entonces, no hay una transición, hay múltiples transiciones, y debe ser una cosa realizable, afrontable y tecnológicamente realizable", explicó Royon.

Hoy Argentina  tiene una gran limitación que son las redes de tranmisión de alta tensión que están saturadas y requieren de inversión en infraestructura para poder seguir incorporando más proyectos de energías renovables.

El gas es el combustible de la transición. "Nosotros, en nuestra patria tenemos un poco de carbón, menos del 1%, pero tenemos mucho gas.  Argentina tiene para avanzar con gas, tiene también para avanzar con biocombustible, recordemos que Argentina tiene las condiciones", explicó la líder de Minenco.

 Argentina tiene los minerales críticos que necesita esta transición pero tiene una deficiencia en materia de electrificación. "La electrificación de la matriz va a llegar en la Argentina, y va a llegar en el mundo, y eso necesita tanto para los proyectos de energía renovable, como para aquellos proyectos de infraestructuras, como para los nombres energéticos más pobres".

Argentina tiene litio, clave para las baterías, tiene cobre que proyecta incrementar su demanda de un 20% a un 50% a 2035; tiene uranio, que está reubicándose como material clave para la energía nuclear por su baja emisión, el nuevo auge del uranio y la innovación tecnológica con los reactores abre nuevos intereses. Y además, el país, cuenta con depósitos de tierras raras, que tienen propiedades tanto magnéticas como electrónicas son requeridas en las grandes imanes de los molinos eólicos, "tenemos realmente todo lo que el mundo necesita y Argentina en ese camino, de nuevo, tiene una gran oportunidad con la transición energética".

LA MUJER Y LOS ROLES DE TOMA DE DECISIÓN

"Yo creo que es importantísimo incorporar a la mujer en esos roles de decisión, porque las mujeres, en mi experiencia, piensan distinto y aportan distinto a la toma de decisiones que son experiencias un poco más reflexivas", dijo Royon.

Tomando como base su experiencia al frente de puestos claves en el espacio público, afirmó que "no existe minería sin provincias mineras. Así que yo creo que el mayor aporte sobre la mirada es desde el federalismo y desde la provincia, y también claramente es distinto a la toma de decisiones, sobre todo en materia de políticas públicas, cuando uno tiene la experiencia de haber recorrido todo el país".

El cargo en Energía le permitió recorrer la mayoría de las provincias de Argentina y destacó "como el interior tiene una gran potencialidad que muchas veces se pone postergada con un aporte significativo. La mirada hacia las comunidades, la mirada de cómo se llevan adelante tanto los proyectos energéticos como los proyectos mineros desde el interior, porque recordemos que los recursos son de las provincias y las provincias son las que lo gestionan. Tener esa experiencia en la gestión de un proyecto minero, en la política pública, en la relación con las comunidades, en la infraestructura, claramente es una mirada diferente".

En su trabajo por el país y su encuentro con mujeres evidenció un cambio en la sociedad, hoy las mujeres jóvenes no deben elegir entre una familia y el trabajo como excluyente. El hombre manifiesta un rol más activo en la crianza, y en este escenario Royon remarca que el desafío es hablarle a esas mujeres de las comunidades que carecen de capacitación, "todas las que estamos acá, tenemos y tuvimos una gran oportunidad de ser formadas, de tener otra capacidad, otros recursos y otras oportunidades".

Y concluyó que "hay unas mujeres que están en las comunidades, que están en otros lugares, que no tienen esas mismas oportunidades y por eso es importante fraccionarlas, darles la mano y llevarlas. Para esas mujeres hace falta capacitación y una capacitación hablándoles a ellas (...) ahí tenemos un problema, una dificultad o una oportunidad, si se quiere, para incentivar este tipo de aprendizajes y lograr la capacitación para el ser humano y corporativo".

Fuente: Mining Press