La primera Mesa de Trabajo de Proveedores para la Minería fue una fuerte señal de la dirección que adoptó el Gobierno nacional con respecto a la actividad minera. Es significativo, incluso, que se haya realizado el miércoles pasado, el mismo día en que Chubut aprobó una ley que habilitó la minería intensiva en un sector de esa provincia, donde existe una gran resistencia de algunos movimientos sociales a la industria extractiva (aunque no pasa lo mismo con el petróleo).

Horas antes de que la Legislatura chubutense diera el visto bueno a la zonificación, el ministro de Desarrollo Productivo de la Nación, Matías Kulfas, sostuvo en la mesa con los empresarios proveedores que la minería "es una llave para solucionar los problemas de la Argentina". En esa jornada estuvo acompañado por la flamante secretaria de Minería de la Nación, Fernanda Ávila (puesta en funciones ese día) y el secretario de Industria, Ariel Schale. El último funcionario puso las cosas en claro: "Somos un ministerio prominero", afirmó.

Kulfas recordó que la minería "paga los salarios más altos que tiene el sector privado en Argentina" y "es una actividad clave para la transición energética" y "una llave para solucionar problemas del país como exportaciones, empleo, y desarrollo de economías regionales".

Buena minería

En la misma línea, el ministro destacó: "Hacer buena minería es cuidar el ambiente y generar oportunidades en un amplio entramado, preocupándose por el desarrollo de las comunidades, con más salud, mejores caminos, más conectividad y más educación".

"Es también una oportunidad para que la actividad productiva se descentralice. La brecha es de 5 a 6 veces entre las regiones más pudientes y las más pobres. Algo que se mantiene desde hace 100 años en nuestro país", agregó el economista.

La secretaria de Minería, Fernanda Ávila, coincidió en que "la minería es un motor de cambio y desarrollo para las comunidades".

"Esta primera mesa de trabajo de desarrollo de proveedores es para desarrollar acciones conjuntas para potenciar las externalidades positivas de la minería y poder desarrollar la industria a través de sus proveedores. Este es el camino que queremos seguir", señaló.

A su turno, Schale indicó que "la diferencia entre los países mineros desarrollados y los que no la han desarrollado aún es la capacidad que han tenido unos para enraizar su minería con otros eslabones productivos. Y esa es la tarea que comenzamos y que queremos llevar a cabo".

"El Gobierno tiene la ambición de colocar a la Argentina en el concierto de las naciones mineras del mundo, porque el país tiene todas las condiciones para ello", dijo el secretario de Industria.